Mujeres en la Universidad Técnica: ¡Un camino hacia la igualdad de oportunidades!

Mujeres en la Universidad Técnica: ¡Un camino hacia la igualdad de oportunidades!

El acceso de las mujeres a la educación superior en Alemania estuvo severamente restringido hasta finales del siglo XIX. Durante este tiempo, las mujeres en países como Estados Unidos, Francia y Suiza ya tenían acceso a universidades y colegios. No fue hasta 1885 que se fundó en Karlsruhe una escuela privada para pintoras bajo el patrocinio de la gran duquesa Luisa. Dos años más tarde, en 1887, a las mujeres se les permitió asistir a conferencias en la Universidad Técnica de Karlsruhe como auditoras invitadas, pero inicialmente sólo en las materias de arte e historia de la literatura. Clara Immerwahr, una de las primeras químicas en doctorarse, enfatizó en sus conferencias el tema “La química en la cocina y en el hogar”.

En 1900, las mujeres de Baden obtuvieron permiso para estudiar. Johanna Kappes adquirió importancia como una de las primeras estudiantes matriculadas regularmente. Magdalena Meub hizo historia al convertirse en la primera farmacéutica autorizada de Alemania y Thekla Schild marcó otro hito al convertirse en la primera ingeniera cualificada de Baden. Irene Rosenberg fue la primera mujer en recibir su doctorado en el Instituto Químico en 1915, lo que dio a las mujeres un lugar importante en la ciencia.

Mujeres en las universidades a través de los tiempos

Durante la década de 1920, las mujeres en la escuela técnica eran una excepción total. Las medidas nacionalsocialistas de 1934 provocaron restricciones drásticas de admisión, lo que provocó una disminución del número de estudiantes femeninas. Después de la Segunda Guerra Mundial, las mujeres regresaron gradualmente a las universidades. La proporción de mujeres aumentó notablemente en los años 60: del 8% en 1970 a más del 14% en 1980. La proporción de mujeres en el Instituto Tecnológico de Karlsruhe (KIT) ronda actualmente el 29%.

Dagmar Gerthsen fue nombrada la primera profesora en 1993, mientras que en 2022 sólo el 18% de las cátedras estaban ocupadas por mujeres. KIT está comprometido activamente con la igualdad de oportunidades y la diversidad e intenta promover el acceso a la educación para todos los géneros. El Centro para la Igualdad de Oportunidades (CfC) es un punto de contacto para la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres y apoya a la universidad en la eliminación de desventajas para mujeres y estudiantes académicamente activos. La responsable de igualdad de oportunidades de la universidad es responsable de representar los intereses de las empleadas en la administración y la tecnología.

Retos y objetivos actuales

Según la Ley Estatal de Educación Superior, es responsabilidad de las universidades tener en cuenta la diversidad de sus miembros y personal universitario. El objetivo es realmente hacer cumplir la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres para que todos los miembros de la universidad, independientemente de su género, origen o estado civil, puedan participar por igual en la vida universitaria. A pesar de los avances, aún quedan desafíos que superar para crear un entorno educativo verdaderamente equitativo. La Agencia Federal para la Educación Cívica destaca que las desigualdades de género en la educación todavía existen y que se necesitan esfuerzos especiales para superarlas.