¡Valiente mujer afgana lucha por la educación de sus compatriotas en Alemania!

¡Valiente mujer afgana lucha por la educación de sus compatriotas en Alemania!

La ciudadana afgana Sabira Saei es un ejemplo de resiliencia y determinación en un momento en que las mujeres en Afganistán enfrentan restricciones drásticas de sus derechos. En agosto de 2021, los talibanes tomaron el poder, lo que significó el fin del empleo y la educación para muchas mujeres, incluida Sabira. Anteriormente había trabajado para un servicio social dirigido por la orden de los jesuitas, pero el régimen finalmente la obligó a huir de su tierra natal. El sueño de una educación para las niñas afganas, que es tan importante para Sabira, se ha visto gravemente amenazado por los cambios sociales. En 2022, a las mujeres se les negó el acceso a las universidades, lo que Natalie Bursinski, del DAAD, calificó de injusto y de reducción del potencial para el país. Esta triste realidad motivó a Sabira a tomar el control de su destino.

Sabira, madre soltera de una hija de cuatro años llamada Helen, se enteró de la beca del DAAD a través de las redes sociales y decidió postularse. El primer paso fue una nominación de una universidad alemana, que recibió de tres instituciones. Finalmente eligió la Universidad Católica de Eichstätt-Ingolstadt. Después de una entrevista, le permitieron estudiar en Alemania con el apoyo del programa Hilde Domin. En abril de 2024 finalmente logró viajar a Eichstätt con su hija. Allí la KU encontró apoyo para encontrar alojamiento y proporcionó a Helen una plaza en la guardería.

Una nueva vida en Alemania

Sabira actualmente está estudiando el tercer semestre y se ha adaptado bien. Aprecia a los motivados compañeros de estudios y a los serviciales profesores que hacen su vida de estudio diaria más fácil. A pesar de los desafíos de comenzar la escuela en un idioma distinto al inglés, ella descubre que los está afrontando bien. Su atención se centra en ampliar las oportunidades educativas y de libertad para las mujeres afganas. Sabira planea iniciar una consultoría empresarial sin fines de lucro que apoyará a las mujeres empresarias en Afganistán.

La situación de las mujeres en Afganistán es preocupante. Desde finales de 2022, no solo ha habido restricciones en el sector educativo, sino también temores de que el regreso de los talibanes pueda conducir a un lento retorno a los viejos patrones. El DAAD participa activamente en iniciativas como el programa EFFAL, que permite a las mujeres refugiadas afganas estudiar en países como Bangladesh y Kirguistán. Los 180 estudiantes apoyados a través de este programa demuestran que la búsqueda de la educación y la igualdad continúa, a pesar de las circunstancias adversas.

La educación como clave del cambio

Los desafíos que enfrentan las niñas en todo el mundo también afectan a las mujeres en Afganistán. A menudo tienen que luchar contra convenciones sociales y culturales que consideran la educación menos necesaria. El matrimonio precoz y la falta de maestras son sólo algunos de los obstáculos que dificultan el acceso a la educación escolar. Según un informe del Banco Mundial, las niñas del África subsahariana pierden hasta el 20 por ciento de su tiempo en la escuela debido a afecciones relacionadas con la menstruación. Condiciones similares se encuentran a menudo en muchos campos de refugiados, donde las niñas no sólo tienen que luchar contra los prejuicios sociales, sino también contra los caminos inseguros para ir a la escuela y las deficiencias higiénicas.

Sabira Saei es un símbolo de esperanza para muchos. Su compromiso con la educación de las niñas y mujeres afganas podría sentar las bases para un cambio a largo plazo en el sistema educativo si alguna vez cambia la situación política en Afganistán. Con su inquebrantable creencia en el poder de la educación, da el ejemplo de que la libertad y la independencia económica son alcanzables para las mujeres, incluso en tiempos difíciles.