Estudio PISA 2025: La educación en Alemania en caída libre: ¡lo que falta ahora!

Estudio PISA 2025: La educación en Alemania en caída libre: ¡lo que falta ahora!

El estudio PISA ha sido un importante punto de referencia para evaluar la calidad de los sistemas educativos en todo el mundo durante 25 años. Este estudio comparativo internacional, iniciado por la OCDE, envía señales claras sobre el desempeño educativo de los jóvenes y plantea interrogantes sobre la justicia y la igualdad de oportunidades en los respectivos sistemas escolares. El próximo examen principal tendrá lugar en abril y mayo de 2025, durante el cual decenas de miles de estudiantes de 15 años completarán tareas de lectura, matemáticas y ciencias naturales. Los resultados de este estudio son a menudo el punto de partida de animados debates sobre la igualdad educativa y la calidad de las escuelas en Alemania y más allá. uni-bamberg.de informó.

La Prof. Dra. Cordula Artelt, catedrática de investigación educativa longitudinal en la Universidad de Bamberg, destaca en una entrevista la comparabilidad internacional del estudio PISA como parte integral de su motivación política. Artelt participó en el primer estudio PISA en 2000 y desde entonces ha contribuido a varios informes. Lo que es particularmente digno de mención es que Alemania ha mostrado una tendencia a la baja durante 12 años, lo que puede atribuirse a los cambios en el cuerpo estudiantil y los desafíos de la digitalización. Para abordar esta evolución, el Ministerio Federal de Educación e Investigación (BMBF) lanzó el programa StartChances, que desde agosto de 2024 apoya específicamente a las escuelas con una alta proporción de estudiantes socialmente desfavorecidos. La eficacia de este programa se evaluará durante el año escolar 2026/2027.

Desigualdad educativa en comparación internacional

El debate sobre el equilibrio entre los estudiantes de alto rendimiento y la desigualdad educativa sigue siendo delicado. Según los datos de PISA de 2022, el análisis de las habilidades matemáticas de los alumnos de noveno grado muestra que los sistemas escolares en los países de la OCDE varían mucho. Los estudiantes de Canadá obtienen un promedio de 484 puntos en matemáticas, mientras que los estudiantes de Grecia sólo obtienen 436 puntos. Lo que llama la atención es la alta proporción de diferencias de desempeño que pueden atribuirse al origen social. En Grecia es del 11,8% y en Canadá del 10,2%. Eslovaquia tiene el nivel más alto de desigualdad educativa dentro de la OCDE con un 25,7%, como bpb.de indica.

Un análisis utilizando los índices de estatus económico, social y cultural (ESCS) muestra que no existe una relación sistemática entre los niveles de desempeño y la desigualdad educativa. Los países en el cuadrante superior de la clasificación de cinco partes –como Japón, Canadá y Corea– tienen un alto desempeño y una baja desigualdad. Alemania, por otro lado, se encuentra en el cuadrante de alto desempeño y alta desigualdad, lo que plantea un desafío para la estrategia educativa. Además, el profesor Artelt expresa su preocupación por la falta de valoración de la profesión docente en Alemania y pide un debate diferenciado al respecto. Ella considera que la representación negativa predominante de los docentes en los medios de comunicación es una causa que podría disuadir a los docentes potenciales.

Aprecio a los profesores.

Artelt sugiere que una mayor valoración de la educación y del papel de los docentes podría tener efectos positivos en todo el sistema escolar. Si bien los debates en curso sobre la reforma escolar y la calidad de la educación son importantes, no pueden pasar por alto las necesidades y los esfuerzos de quienes están en las aulas todos los días. La sociedad debe preguntarse cuánto vale para ella la educación de la próxima generación y cómo deberían diseñarse las condiciones marco para los docentes para crear un entorno de aprendizaje positivo.