Controles fronterizos más estrictos: ¡Qué significa el futuro para los inmigrantes!
El 17 de julio la Universidad Europea Viadrina debatirá los desafíos jurídicos y humanitarios en la frontera germano-polaca.

Controles fronterizos más estrictos: ¡Qué significa el futuro para los inmigrantes!
Actualmente la atención se centra en la evolución de las fronteras exteriores de Alemania, en particular en lo que respecta a los controles entre Alemania y Polonia. Desde otoño de 2023, Alemania ha ampliado los controles en sus fronteras exteriores. Se presta especial atención a la región fronteriza entre Frankfurt (Oder) y Słubice. El 4 de julio de 2025, el Tribunal Administrativo de Berlín dictaminó que el rechazo de tres refugiados en esta frontera era ilegal. Esto plantea dudas sobre la sostenibilidad y legalidad de los actuales controles fronterizos que el gobierno federal ha ordenado para combatir la migración irregular.
Además de los controles existentes, el gobierno polaco ha anunciado que introducirá sus propios controles fronterizos más estrictos a partir del 7 de julio de 2025. Las medidas tienen como objetivo principal limitar el flujo de inmigrantes. El primer ministro polaco, Donald Tusk, subrayó tras una reunión de gabinete que estas decisiones tendrán profundas consecuencias para la libertad de circulación de las personas. Los controles estacionarios de personas en las fronteras interiores del espacio Schengen suelen ser inusuales, por lo que estos nuevos acontecimientos se debaten críticamente.
Mesa redonda sobre política fronteriza
En el marco del debate sobre los controles fronterizos, la Universidad Europea Viadrina Frankfurt organiza una mesa redonda el 17 de julio a las 18.15 horas. Este evento está dedicado a los desafíos legales, políticos y humanitarios de los controles fronterizos. El debate se llevará a cabo en la Sala del Senado Viadrina o en la transmisión en vivo.
Los invitados al panel, entre ellos el Dr. Marcus Engler y Lea Christinck del Centro Alemán para la Investigación sobre la Integración y la Migración (DeZIM), así como el Dr. Norbert Cyrus del Centro Viadrina B/ORDERS IN MOTION, analizarán la evolución en la frontera entre Alemania y Polonia en relación con el Estado de derecho y las relaciones. Esto incluye una revisión de cuán efectivos son los controles fronterizos internos para reducir las entradas irregulares y el contrabando.
El debate también arrojará luz sobre los efectos negativos en la región fronteriza, la protección de los refugiados y las relaciones entre Alemania y Polonia. El evento será moderado por la Prof. Dra. Kira Kosnick, que también trabaja en el Centro Viadrina B/ORDERS IN MOTION y cuenta con el apoyo de la Alianza Universitaria Europea de la Reforma (ERUA) y el Instituto Viadrina de Estudios Europeos (IFES).
Reacciones e implicaciones políticas
El gobierno federal ha ampliado los controles fronterizos, lo que está provocando controversia en el panorama político. El canciller Friedrich Merz de la CDU confirmó el estrecho intercambio con el gobierno polaco y dejó claro que no habrá retornos a Polonia de los solicitantes de asilo que hayan llegado a Alemania. En el debate político, algunos, como Sonja Eichwede (SPD), opinan que los controles representan un menoscabo de la libertad de circulación en el espacio Schengen.
El Primer Ministro de Baviera, Markus Söder (CSU), se mostró comprensivo con los controles polacos. Por otro lado, Knut Abraham (CDU), comisario del Gobierno federal para Polonia, advirtió contra los controles fronterizos permanentes, ya que podrían tener efectos negativos sobre la libertad de circulación en toda Europa. Los Verdes también culpan al ministro federal del Interior, Alexander Dobrindt (CSU), del “efecto dominó” provocado por la política migratoria más estricta.
Las acciones tomadas por los gobiernos no son aisladas; Forman parte de una estrategia más amplia de la UE destinada a mejorar la gestión de la migración y proteger las fronteras exteriores. En 2015, se registraron 1,83 millones de cruces fronterizos ilegales en las fronteras exteriores de la UE, lo que generó conciencia sobre la necesidad de mayores controles fronterizos. El nuevo Fondo para la Gestión Integrada de las Fronteras (IBMF), con un presupuesto de 9.880 millones de euros, tiene como objetivo aumentar las capacidades de gestión de las fronteras de los Estados miembros y garantizar los derechos fundamentales, especialmente de los grupos vulnerables.
Con la introducción de controles para las personas que no pueden viajar a través del previsto Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes (ETIAS), que se espera que esté operativo a mediados de 2025, se intensificará aún más la atención a la seguridad de las fronteras exteriores. Estos acontecimientos muestran que la cuestión de la migración y su control sigue siendo altamente explosiva en Europa, lo que hace que las próximas discusiones sean aún más relevantes.