El cambio climático amenaza a los árboles en Braunschweig: ¡estrés y falta de nutrientes!
Los investigadores de TU Braunschweig están investigando las deficiencias de nutrientes en los árboles urbanos para fortalecer su resiliencia a los efectos del cambio climático.

El cambio climático amenaza a los árboles en Braunschweig: ¡estrés y falta de nutrientes!
El cambio climático tiene un impacto directo en los árboles de Braunschweig y sus alrededores, según un estudio de Universidad Técnica de Braunschweig reveló. El calor extremo, la sequía persistente y la falta de nutrientes pasan factura a los árboles. En los últimos tres meses, la región ha recibido sólo 40 mm de lluvia, apenas el 25% de los 160 mm habituales.
Los árboles urbanos muestran claros síntomas de estrés. Especialmente los plátanos se encuentran en mal estado, como por ejemplo frente a la cafetería Katharinen. Estos árboles sufren una caída prematura de las hojas y un vigor reducido. La escasez de agua es especialmente problemática, ya que seca el suelo no sólo en verano sino también en primavera.
Amenazas existenciales para las especies de árboles
La situación es tan grave que especies arbóreas autóctonas como el haya y el roble están sufriendo estrés existencial. Este es particularmente el caso en zonas urbanas y poco profundas. Esta escasez de agua debilita el sistema inmunológico de los árboles y los hace más vulnerables a plagas y patógenos. Insectos como el descortezador y la procesionaria del roble se están extendiendo por el norte de Alemania.
Los informes actuales muestran que en Alemania sólo uno de cada cinco árboles se considera sano. La presión que ejerce el cambio climático sobre los bosques de Europa Central requiere una gestión forestal adaptada. Otro problema es la falta de azufre, que se ha visto agravada por leyes de calidad del aire más estrictas.
Enfoques de investigación para mejorar la resiliencia
Para combatir estos desafíos, los científicos de TU Braunschweig llevaron a cabo una investigación sobre la aplicación específica de azufre para aumentar la resistencia de los árboles al estrés. Tanto los ensayos en maceta como en el campo están en la agenda para analizar los efectos de la deficiencia de azufre en la salud de las plantas. Los hallazgos podrían proporcionar importantes impulsos para la futura gestión forestal.
Otro enfoque para promover la resiliencia de los árboles urbanos a la sequía es a través de la Agencia Federal de Medio Ambiente soportes. El trabajo de investigación tiene como objetivo seleccionar sustratos de suelo regionales adecuados y especies y variedades de árboles adaptadas al clima. Están previstos estudios comparativos en viveros de árboles y ubicaciones reales de ciudades.
Un aspecto central de la resiliencia es el equipamiento adecuado de las ubicaciones de los árboles. Los árboles jóvenes son particularmente susceptibles al estrés de la sequía, mientras que los ejemplares más viejos son más capaces de afrontar estos desafíos. En Hamburgo, por ejemplo, casi la mitad de los árboles de las calles tienen más de 40 años, lo que los hace más resilientes a los efectos del cambio climático.
Por lo tanto, la protección y el mantenimiento de la población de árboles establecida son cruciales para el desarrollo urbano sostenible. Para gestionar mejor las necesidades de agua, se recomendó que se incluyera en las obligaciones contractuales un riego más frecuente y constante. Los sensores que miden la humedad del suelo a diferentes profundidades muestran que los sustratos existentes pueden ya no ser suficientes para garantizar la absorción de agua.
En resumen, el estado de los árboles de la ciudad de Braunschweig es un ejemplo sorprendente de los desafíos que enfrenta la vegetación urbana ante el cambio climático. Los proyectos de investigación en curso serán cruciales para determinar cómo las comunidades afrontarán las condiciones climáticas cambiantes en el futuro.