Nuevo estudio: ¡Cómo la era nazi da forma a la cultura del recuerdo en Europa!

Nuevo estudio: ¡Cómo la era nazi da forma a la cultura del recuerdo en Europa!

Un estudio internacional dirigido por la Dra. Fiona Kazarovytska de la Universidad Johannes Gutenberg de Mainz (JGU) examina la percepción de su propia población durante la era nazi en Europa. Los resultados de esta innovadora investigación se publicaron en la revista *Political Psychology* y se basan en una encuesta en línea a 5.474 personas de ocho países europeos: Bélgica, Francia, Lituania, Países Bajos, Austria, Polonia, Ucrania y Hungría. Los participantes fueron seleccionados para que fueran representativos en función de su edad y género con el fin de obtener la imagen más completa posible.

El objetivo del estudio es explorar los recuerdos de las personas sobre el papel de sus respectivas poblaciones bajo la ocupación nazi. Se pidió a los encuestados que estuvieran de acuerdo en una escala del 1 al 7 con afirmaciones como "La gente de mi país fue perseguida porque resistió" o "La población no tuvo más remedio que cooperar con los nazis". Sorprendentemente, existe un patrón consistente de recuerdo: en muchos países, los propios antepasados ​​a menudo son percibidos como “víctimas-héroes” que sufrieron y resistieron al mismo tiempo.

Memoria colectiva e identidad nacional

Un hallazgo central del estudio es la idea generalizada de que la colaboración con el régimen nazi resultó principalmente del miedo o la coerción. Sin embargo, está históricamente demostrado que numerosos gobiernos y sectores de la población cooperaron activamente con los ocupantes alemanes. Sin embargo, esta colaboración ideológicamente motivada suele recibir menos énfasis en las memorias colectivas que en las narrativas de victimismo y heroísmo.

Esta forma de autoubicación moral podría estar profundamente arraigada en los mecanismos psicológicos de la memoria colectiva. Ya se han demostrado patrones similares en la población alemana y sugieren que estas formas de autoglorificación también existen en otras sociedades europeas, a pesar de los diferentes roles históricos que desempeñaron estos países. La representación positiva del papel de los antepasados ​​parece servir como estrategia para preservar la identidad nacional.

Contextos históricos: huida y expulsión

En el contexto más amplio de la cultura del recuerdo, la huida y expulsión de los alemanes en 1944/45 son un tema importante. Durante décadas, el debate sobre las víctimas alemanas y su sufrimiento se consideró ofensivo y retrospectivo. Sólo con la apertura del Telón de Acero en la década de 1990 este tema volvió al debate público. Autores como Verena Dohrn, Martin Pollack y Ralph Giordano han contribuido decisivamente a abordar el tema a través de sus obras.

Particularmente importante fue la novela corta de Günter Grass “Im Krebsgang”, considerada un avance en el debate. En las últimas décadas, la huida, la expulsión y la campaña de bombardeos han desempeñado un papel central en los medios de comunicación y la ciencia. El Bundestag también decidió crear un centro contra las expulsiones, aunque su ubicación es controvertida.

Efectos psicológicos y desafíos futuros.

El impacto psicológico del desplazamiento es grave. Muchos de los afectados padecen trastorno de estrés postraumático (TEPT) y otras tensiones emocionales. Además, el recuerdo colectivo provoca un cambio en la percepción de la huida y la expulsión. En la tercera fase de recuerdo colectivo, que comenzó después de 1989, muchos buscan identidad y raíces, mientras que los encuentros entre alemanes y europeos del este promueven un intercambio sobre historia y recuerdos.

Los desafíos futuros incluyen reconocer el sufrimiento alemán y buscar empatía por otros grupos de víctimas. Un centro contra las expulsiones en Berlín podría desempeñar un papel central en la cultura del recuerdo. Por tanto, los resultados del último estudio ofrecen nuevos conocimientos sobre los mecanismos psicológicos detrás de las culturas colectivas de recuerdo y su relevancia social.