Mujeres en la ciencia: por qué la visibilidad sigue sufriendo
El estudio KIT muestra que las mujeres están subrepresentadas en la cobertura mediática de la ciencia. Obtenga más información sobre las desigualdades estructurales.

Mujeres en la ciencia: por qué la visibilidad sigue sufriendo
Los informes sobre temas científicos suelen estar dominados por hombres, como muestra un estudio reciente del Instituto Tecnológico de Karlsruhe (KIT). Este estudio sobre la visibilidad de las mujeres en los medios de comunicación que informan sobre temas de riesgo científico muestra que las científicas sólo son citadas en el 18 por ciento de los casos. La proporción de mujeres en los campos de investigación examinados ronda el 31 por ciento. Esto pone de relieve una discrepancia significativa entre la representación real de las mujeres en la ciencia y su visibilidad en los medios. A pesar de esta subrepresentación, los investigadores no encontraron evidencia de discriminación directa a través de rutinas de selección periodística. Más bien, los resultados muestran que la visibilidad de los medios depende en gran medida de la posición jerárquica, la productividad y la influencia de la investigación.
Este estudio se basa en el análisis de 4.860 artículos de cuatro importantes medios alemanes publicados entre 1995 y 2020. Examina ocho temas de riesgo relacionados con la ciencia, como el ébola, el glifosato y el COVID-19. Se registraron y codificaron sistemáticamente alrededor de 1.800 científicos. Los resultados ilustran que las mujeres suelen tener menos probabilidades de ocupar puestos altos y lograr puntuaciones más bajas en publicación y reputación. La subrepresentación de científicas refleja desigualdades estructurales en el sistema científico y muestra que el periodismo no sólo refleja jerarquías académicas, sino que también las refuerza sin promoverlas activamente.
El oleoducto con fugas y sus consecuencias
La discrepancia entre el número de hombres y mujeres en la ciencia también se ve reforzada por el fenómeno del “leaky pipeline”. En Alemania, las mujeres ahora tienen una buena educación, pero su participación en las universidades disminuye a medida que avanzan en la carrera académica. Según el Ministerio Federal de Investigación, Tecnología y Espacio (BMFTR), la proporción de mujeres por carrera académica es la siguiente: el 46 por ciento de los estudiantes de doctorado son mujeres, sólo el 36 por ciento de los candidatos postdoctorales y sólo el 29 por ciento de los profesores.
Para contrarrestar esto, el BMFTR ha lanzado varias iniciativas. Esto también incluye el programa de profesoras, que sirve como instrumento central para promover la igualdad en las universidades. La cuarta fase del programa se inició en 2023 y se extenderá hasta 2030 con un volumen de financiación de 320 millones de euros. Otras medidas incluyen el modelo en cascada de 2011, que garantiza que la proporción de mujeres en cada nivel profesional sea al menos igual al nivel anterior.
Retos y oportunidades para las mujeres en la ciencia
A pesar de estos avances, la realidad es que las mujeres en la ciencia todavía enfrentan numerosos desafíos. Históricamente, a menudo fueron sistemáticamente ignorados y no nombrados. Incluso ahora, muchas mujeres tienen dificultades para que sus voces sean escuchadas y creídas. La profesora Elke Wolf, de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Múnich, destaca que las prácticas y estereotipos específicos de género perjudican a las mujeres en las materias MINT. Esta percepción se describe con el término “clima frío”, que representa una atmósfera de trabajo poco acogedora para las mujeres en campos dominados por hombres.
El llamado efecto Mathilda muestra que las contribuciones de las mujeres a la ciencia suelen ser menos reconocidas. Este es un problema histórico que también afectó a destacadas científicas como Lise Meitner y Rosalind Franklin. Esto también tiene implicaciones financieras: las profesoras ganan una media de 660 euros menos que sus colegas varones en el nivel salarial más alto. Esto demuestra que a pesar de todas las iniciativas para promover la igualdad, todavía queda mucho por hacer.
Promover la visibilidad y los logros de las mujeres en la ciencia es crucial para desmantelar los estereotipos de género. Iniciativas como “La diversidad conecta” pretenden no sólo aumentar la igualdad de oportunidades, sino también concienciar sobre los aspectos diferenciados por género en la investigación. Científicos como Ylva Götberg, reconocida como líder emergente en la revista TIME, son importantes modelos a seguir que demuestran que vale la pena luchar por la propia visibilidad.
En resumen, se puede decir que la visibilidad mediática de las mujeres en la ciencia está muy por detrás de sus cifras reales. Las desigualdades y desventajas estructurales que experimentan las mujeres en el sistema científico siguen siendo un desafío que debe superarse. Tanto la educación como la financiación específica desempeñan un papel clave en el futuro de la ciencia.
Para obtener más información sobre estos temas, puede consultar los informes del KIT, el BMFTR y los análisis en Tagesschau.de: EQUIPO, BMFTR y noticias diarias.