Estimulación cerebral profunda revolucionaria: ¡nueva esperanza contra la tartamudez!
Los científicos de la Universidad de Frankfurt están utilizando la estimulación cerebral profunda para tratar la tartamudez. Resultados y perspectivas de la investigación.

Estimulación cerebral profunda revolucionaria: ¡nueva esperanza contra la tartamudez!
La investigación sobre estimulación cerebral profunda (DBS) está logrando avances significativos en el tratamiento de diversas enfermedades neurodegenerativas. Las perspectivas son cada vez más prometedoras, especialmente en el tratamiento de enfermedades como la enfermedad de Parkinson y la tartamudez. Así informado puk.uni-frankfurt.de que un equipo dirigido por Christian Kell del Centro Médico Universitario de Frankfurt y Nils Warneke y Katrin Neumann del Hospital Universitario de Münster han utilizado con éxito el método para aliviar la tartamudez. La intervención se centra en la estimulación eléctrica del tálamo izquierdo, lo que ha contribuido a una reducción significativa de la frecuencia de la tartamudez.
Los resultados son prometedores: después de la estimulación, la frecuencia de la tartamudez disminuyó en un 46% y la gravedad de los síntomas también disminuyó. Estos avances son notables, especialmente porque hace 30 años se sospechaba de causas psicológicas de la tartamudez. Hoy sabemos que también influyen factores genéticos y diferentes estructuras cerebrales. En las personas que tartamudean, la corteza auditiva del hemisferio izquierdo del cerebro interactúa menos con la corteza motora, lo que se cree que es la causa de la tartamudez.
Investigación sobre DBS en la enfermedad de Parkinson
La diversidad en el uso de la estimulación cerebral profunda también es evidente en el tratamiento de la enfermedad de Parkinson. charite.de informa estudios actuales que abordan los efectos motores y cognitivos de la estimulación cerebral profunda. Curiosamente, los resultados muestran que los efectos secundarios cognitivos indeseables se transmiten a través de vías neuronales diferentes a las de los efectos motores positivos. Por tanto, la DBS demuestra ser una alternativa de tratamiento eficaz para los pacientes que no responden adecuadamente al tratamiento farmacológico.
La estructura objetivo de la estimulación cerebral profunda es el núcleo subtalámico, que es responsable no sólo de las secuencias de movimiento sino también de los procesos cognitivos. Investigadores del Departamento de Neurología del campus Charité Mitte han llevado a cabo experimentos conductuales y de imágenes destinados a ayudar a optimizar las terapias y mejorar la calidad de vida de los pacientes. Utilizando mediciones de la actividad nerviosa, los científicos quieren identificar patrones específicos de enfermedades e individualizar la terapia.
Últimos avances en la investigación sobre estimulación cerebral
Un equipo de investigación de Charité proporciona información adicional sobre los efectos de la dopamina y su imitación por parte de la DBS. Alto charite.de El equipo utiliza el aprendizaje automático para analizar las señales cerebrales de la corteza sensoriomotora. Estos hallazgos son importantes para el desarrollo de interfaces inteligentes cerebro-computadora que podrían acelerar la comunicación entre el cerebro y los músculos.
Los estudios con 25 pacientes de Parkinson que se sometieron a estimulación cerebral profunda demostraron que la estimulación cerebral profunda puede imitar la función de la dopamina en el cerebro. Esto está resultando revolucionario para el tratamiento de síntomas como la acinesia, donde los pacientes tienen dificultades para iniciar movimientos voluntariamente.
En general, la investigación sobre estimulación cerebral profunda ofrece enfoques prometedores para mejorar las opciones de tratamiento para la tartamudez y la enfermedad de Parkinson. Sin embargo, dada la complejidad de las enfermedades, queda por ver cómo se pueden implementar estos enfoques en la práctica clínica.