Pobreza energética en Alemania: millones de hogares afectados, ¿y ahora qué?
En el Día del Ahorro de Energía de 2025, el artículo destaca los desafíos de la pobreza energética en Alemania y sus impactos sociales.

Pobreza energética en Alemania: millones de hogares afectados, ¿y ahora qué?
El 5 de marzo se celebró el Día del Ahorro Energético para concienciar a los ciudadanos sobre su propio consumo energético. El desafío de dominar la transición climática y energética se ve agravado aún más por la realidad de la pobreza energética en Alemania. Alto uni-muenster.de Alrededor de tres millones de hogares alemanes se ven afectados por la pobreza energética. Estos hogares no pueden satisfacer sus necesidades energéticas básicas, como calefacción o duchas inadecuadas.
La pobreza energética, término que describe las barreras financieras y la incapacidad de invertir en servicios energéticos esenciales, a menudo ocurre junto con la vulnerabilidad energética. Esto se refiere al aumento de los precios de la energía fósil y a las reducidas oportunidades para que los hogares inviertan en renovaciones que ahorren energía.
Alcance de la pobreza energética en Alemania
Sólo en Alemania, el 75% de los hogares se calientan con combustibles fósiles, lo que aumenta la amenaza de pobreza energética. Según un estudio del Ökoinstitut, realizado por encargo de la Agencia Federal de Medio Ambiente, la proporción de hogares vulnerables que padecen estas enfermedades ronda el 10%. Esto corresponde a alrededor de tres millones de un total de 30 millones de hogares.
Las personas de bajos ingresos, especialmente las mujeres y los solteros, se ven especialmente afectadas. Estos grupos gastan una parte desproporcionada de sus ingresos en costos de energía y a menudo tienen un acceso limitado a ofertas de ayuda como el dinero climático planificado, que no se implementó debido al fracaso del gobierno del semáforo. Aunque existen ofertas de ayuda, a menudo resulta difícil acceder a ellas para las personas con bajos ingresos.
Problemas estructurales y posibles soluciones.
La pobreza energética se considera cada vez más como un problema estructural separado y no como parte de la pobreza general. Un análisis exhaustivo muestra que los hogares afectados no pueden invertir en renovaciones para mejorar su eficiencia energética debido a restricciones presupuestarias. Alto oeko.de Por lo tanto, es necesario mejorar la recopilación de datos para captar la magnitud del problema de manera más eficaz.
Si se analiza el contexto europeo, se estima que la pobreza energética afecta a 50 millones de hogares en Europa. Aunque en Alemania el riesgo es menor que en la media europea, el número de afectados sigue aumentando continuamente. La pandemia de coronavirus ha exacerbado las desigualdades económicas y sociales, agravando la situación de muchos hogares. Los más afectados son los sectores de ingresos más bajos: el 15,4% afirma que las condiciones de calefacción son inadecuadas.
Consecuencias sanitarias y sociales.
Las temperaturas frías en los espacios habitables no sólo pueden provocar resfriados e infecciones similares a la gripe, sino que también pueden provocar problemas psicológicos como estrés y depresión. Esto es particularmente cierto para las mujeres, que tienen una necesidad energética desproporcionada debido a la brecha salarial de género y la distribución de tareas específica de cada género. Pasan más tiempo en casa, lo que aumenta aún más su necesidad de servicios energéticos adecuados.
Para combatir eficazmente la pobreza energética, son necesarios ajustes en los sistemas de seguridad social y de seguro mínimo, así como en los costes energéticos. La necesidad de acción política es evidente y requiere un seguimiento específico y medidas bien pensadas para hacer justicia a los hogares afectados. wecf.org describe la urgencia de incluir una perspectiva de género y mejorar la situación de los datos para abordar específicamente estos desafíos.